La bajada de bandera diurna pasará a tener un precio de $237,45 y la nocturna de $284,77. Además, la ficha se bajó de 160 metros a 130.
La aprobación del proyecto de ordenanza elevado por la Municipalidad vino de la mano de los bloques de Unión por la Patria y de Identidad Popular, mientras que la oposición con Unidos por San Luis, la UCR, el PRO y Libres del Sur, se abstuvo. El resultado fue 7 a 6.
También se contempló que la cantidad de metros para caída de ficha se vea reducida. Pasará de 160 metros a 130. Lo mismo había ocurrido en la anterior actualización cuando se ubicaba en 180.
En otras palabras, los vecinos no solo tendrán que afrontar la suba del servicio semipúblico sino que verán reducida la distancia de la ficha. En marzo de este año ocurrió el primer aumento cuando la bajada diurna tuvo una actualización del 30% y la nocturna del 46%.
El presidente de la comisión de Transporte, Juan Martín Divizia (Unión por la Patria) defendió el proyecto de actualización elevado por el intendente Sergio Tamayo. Explicó que durante la semana mantuvieron una reunión con representantes del sector y que la suba se encuadra en el “aumento de los costos de los servicios”.
“Afrontan una realidad difícil desde hace ya un par de años con la suba de los vehículos, cubiertas, repuestos, baterías, ópticas, combustibles, etc. Todo esto afecta directamente el salario, más allá de que no tienen uno fijo, lo cual los pone en una situación compleja”, puntualizó en su intervención. Además, agregó que, a los concejales, los ubican en una posición “entre la espada y la pared, es decir, estar con los taxistas y los usuarios”.
Finalmente la iniciativa fue aprobada y solo restará que sea promulgada por el municipio en el Boletín Oficial para que entre en vigencia.