Luego de un extenso debate, la Cámara de Diputados provincial aprobó por 24 votos afirmativos y 17 negativos (todos los que responden al exgobernador Alberto Rodríguez Saá) el proyecto de ley enviado por el Ejecutivo, en el que solicita autorización para vender el inmueble donde funciona la Casa de San Luis, ubicado en la calle Azcuénaga de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Eugenia Gallardo, diputada por el departamento Pueyrredón y presidenta de la comisión de Finanzas, Obras Públicas y Economía, remarcó la importancia de su aprobación y explicó que los fondos recaudados se utilizarán en primer lugar para seguir trabajando en la restauración del Hospital Regional ‘Juan Domingo Perón’ de Villa Mercedes, y en caso de un remanente, en infraestructura sanitaria para el sistema público provincial.
La semana pasada, diputados del departamento Pedernera, miembros de la comisión que preside Gallardo y de la comisión de Asuntos Constitucionales visitaron el centro de salud que es cabecera de la Zona Sanitaria 2 y abarca la atención de los departamentos Pedernera, Dupuy y gran parte de Chacabuco y Pringles.
Los legisladores fueron recibidos por su directora, Berta Arenas, y arquitectos e ingenieros de los ministerios de Hacienda e Infraestructura, de Salud y del hospital. Recorrieron las instalaciones para conocer de primera mano el pésimo estado en el que lo dejó la gestión anterior, agravado por el temporal que sufrió la ciudad el año pasado. El hospital tiene graves problemas edilicios y de humedad, cielorrasos destruidos y paredes en mal estado. También los consultorios externos están fuera de servicio y hay equipamiento con peligro de ruptura.
Por otra parte, el Palacio Lagomarsino, que es donde funciona actualmente la Casa de San Luis, está instalado en una zona privilegiada de la ciudad y resulta una inversión muy onerosa para estos tiempos en los que los trámites pueden realizarse a través de internet u otros medios electrónicos. El inmueble cuenta con 1.443 metros cuadrados, distribuidos en cuatro plantas, con ascensor, al menos dos baños por piso, salones de diferente magnitudes e importancia y varias oficinas privadas.