Invitado por el rector de la Universidad Nacional de Villa Mercedes (UNViMe), Marcelo Sosa, este jueves por la mañana, el gobernador Claudio Poggi, visitó el edificio ubicado en Las Heras 377, “que ha sido adaptado para brindar diversas prestaciones a alumnos y personal docente y no docente, con vistas a extenderlas en el futuro a la comunidad”, explicó el médico y auditor Rodolfo Gargiulo.
El profesional señaló que en esta primera etapa, el flamante centro contará con boxes para fisioterapia y kinesioterapia y que pronto sumarán el gimnasio de rehabilitación, neurología, servicio de enfermería y obstetricia. “En este lugar, los alumnos de carreras de la salud harán sus prácticas, bajo la supervisión de los docentes responsables de las distintas asignaturas”, dijo.
La ceremonia tuvo un tono emotivo, ya que el nombre elegido para el centro es el del médico Fernando Romero, un pediatra muy apreciado en Villa Mercedes. En más de una ocasión estuvo al frente del Hospital Regional ‘Juan Domingo Perón’, mientras que de modo paralelo desarrolló diversas tareas sociales.
En noviembre de 2020, tras permanecer varios días en la terapia intensiva del policlínico que tanto amaba, el ‘Gordo’, como lo llamaban sus amistades, dio el último suspiro tras luchar con un agudo cuadro de Covid-19.
Luciano, uno de sus hijos, agradeció en nombre de su familia el gesto de la universidad de rendirle homenaje a tan apreciado trabajador de la salud.
El rector Sosa también expresó sus respetos a Romero y precisó la importancia para la UNViMe de contar con un organismo propio dedicado a la salud, tanto por las prestaciones que brindará en materia de atención, como el apoyo en la formación de los jóvenes que han elegido como carrera las ciencias de la curación.
“¿Cuál es el legado? Es servir a la comunidad. Acá los chicos, los estudiantes, los que trabajan, los profesores, los no docentes van a estar mejor. Y para nosotros es un hecho histórico en la vida de la universidad que podamos llegar a la inauguración de este centro. La historia no empezó con nosotros, pero sí somos los responsables de mejorar el legado que recibimos y transformarlo para el bien de la comunidad. La pandemia se llevó al doctor Romero, pero su mensaje sigue vivo. Nuestro lema es humanizar la universidad, y coincide con lo que nos enseñó el doctor, humanizar la medicina”, expresó el rector Sosa.
Seguidamente, el rector Sosa, el vicerrector Santiago Farenga y demás autoridades académicas, hicieron entrega a la familia Romero un presente alusivo a la figura del médico, y luego realizaron el corte de la cinta inaugural.
Luego del descubrimiento de una placa que fecha la inauguración del Centro Integral de Salud, realizaron un recorrido por sus instalaciones, ocasión en la que se ratificó la intención de llevar adelante ampliaciones, tanto edilicias como de prestaciones.
Luciano Romero, hijo del pediatra homenajeado a través del centro que lleva su nombre, agradeció a las autoridades y público que estuvo en el acto y consideró que con este espacio para atender la salud de la comunidad, el legado de su padre, sigue vivo. “Realmente esto es lo que él quería, la parte social, ayudar. Nunca pidió reconocimiento, nada a cambio. Es muy importante para nosotros, para mis hijos, para los nietos, poder el nombre de de mi padre. Estoy muy orgulloso, muy contento. El decía que había que humanizar la medicina, siempre me decía de que lo importante es la atención al paciente. Uno nunca sabe los problemas que el paciente tiene detrás, la responsabilidad es tratar de ayudarlo, tanto en su enfermedad como en lo personal”, dijo.