Este miércoles, la Cámara de Diputados aprobó con 23 votos afirmativos y 16 negativos la adhesión de la provincia al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI). Esta normativa, promovida por el Ejecutivo, tiene como objetivo atraer grandes capitales y fomentar el desarrollo en sectores estratégicos para la provincia, como la energía, el turismo, la infraestructura y la tecnología.
El RIGI busca atraer inversiones superiores a 200 millones de dólares a cambio de beneficios impositivos, aduaneros y cambiarios, así como estabilidad fiscal por 30 años. Esto permitirá que la provincia reciba inversiones que impulsarán el crecimiento económico y la generación de empleo genuino.
El diputado por Pueyrredón, Carlos “Charly” Pereyra, señaló la importancia de acompañar este proyecto y destacó los principales objetivos de este régimen “en una provincia donde se ha hecho culto del pobrismo durante muchas décadas”.
Algunos de ellos son incentivar las grandes inversiones nacionales y extranjeras con el fin de garantizar la prosperidad del país; promover el desarrollo económico; desarrollar y fortalecer la competitividad de los diversos sectores económicos; incrementar las exportaciones de mercaderías y servicios al exterior; potenciar la creación de empleo; y generar condiciones de previsibilidad y estabilidad para las grandes inversiones.
Uno de los puntos más importantes de esta ley es que San Luis no cederá el control sobre sus recursos naturales. En el Artículo 2 del proyecto se establece que la provincia no delegará facultades, respetando lo dispuesto en el Artículo 121 de la Constitución Nacional. Esto asegura que cualquier proyecto de inversión respete la biodiversidad y el entorno natural de San Luis.
Sobre este punto, la diputada por Pueyrredón, Eugenia Gallardo, explicó que “son las jurisdicciones provinciales las que tienen que habilitar a los emprendimientos que surjan a partir de la adhesión de esta ley. Es decir, que es la provincia la autoridad de aplicación”.
San Luis es una de las provincias con mayor valor agregado bruto del país y se posiciona entre las que más invierten en investigación y desarrollo, lo que refuerza su capacidad de aprovechar este régimen de incentivos.
Además, no todas las provincias cuentan con los recursos necesarios para beneficiarse del RIGI. San Luis, en cambio, tiene un gran potencial en energías renovables, como la solar, la eólica y la del biogás. Esto, sumado a su ubicación estratégica en el Corredor Bioceánico y su infraestructura, la convierte en un lugar ideal para recibir grandes inversiones y desarrollar nuevos polos productivos.
“Creemos que la producción de energías limpias es una gran oportunidad. De hecho, se han realizado grandes inversiones en la provincia por un monto similar o incluso mayor al que el RIGI apuesta. Creemos que va a generar trabajo genuino. Las energías limpias son el futuro del desarrollo de las industrias. Tenemos parques industriales en notable decrecimiento por la falta de acompañamiento del Estado provincial en la gestión anterior. Ahora existe una voluntad de acompañar a la industria de San Luis, que ha sido por lo que San Luis se ha identificado, por lo que San Luis se ha desarrollado, por lo que San Luis ha crecido”, agregó Gallardo.
La legisladora también abordó las preocupaciones sobre los posibles impactos ambientales que se plantearon durante los debates en la comisión que analizó el proyecto: “Sabemos perfectamente que la mega minería, la explotación de petróleo y gas, y la producción forestal destinada a la industria maderera, con un piso de 200 millones de dólares, no son atractivos para posibles inversores”, dijo.
“Estamos convencidos que adherir a esta ley representa y va a representar una gran oportunidad para el crecimiento y desarrollo de la provincia. Creo que se están dando las condiciones oportunas, es una manera de mirar el futuro de la provincia”, finalizó Gallardo.
