En pos de realizar un acto de reparación histórica y justicia social, el gobernador Claudio Poggi se trasladó este lunes hasta el Centro Cultural de Juana Koslay y estampó su rúbrica en el decreto de homologación de una adenda que permite comenzar a construir en la localidad las primeras 25 viviendas que quedaron pendientes de su anterior gestión por falta de tiempo.
Estas casas le corresponden a aquellos inscriptos en los planes ‘Progreso’ y ‘Sueños’, quienes debieron recibirlas en 2016 con una inversión que dejó presupuestada el año anterior el propio Poggi para la gestión que lo sucedió, pero que fue descontinuada sin motivo, dejando truncados durante ocho años los sueños e ilusiones que cada familia proyectó con el techo propio.
Con una maqueta representativa de la vivienda a su lado, el Mandatario se tomó un momento para repasar el camino repleto de frustraciones que transitó junto con los vecinos que fueron defraudados. “Hoy comparto la emoción, pero también la angustia acumulada de cada uno de ustedes. Fueron años de maltrato e indiferencia, tenían toda la ilusión depositada en esta iniciativa y padecieron una injusticia. No son casas de un gobernador u otro, son casas del Estado, por eso pido disculpas en nombre del Estado”, expresó.
El documento homologado fue previamente firmado por la directora de Obras de Arquitectura y Viviendas, Marina Ortiz, y la socia gerente de la empresa ‘Construcciones Esperanza’, Brenda Chavero. Luego, Ortiz brindó detalles técnicos acerca de cómo estarán conformadas las casas, que estarán ubicadas en el barrio 274 Viviendas, frente a la rotonda de Los Puquios, donde está emplazada una escultura en homenaje a las Islas Malvinas.
El Gobernador recordó que en cada encuentro con un beneficiario, les repetía lo mismo: “No acepten la devolución de la plata, si el pueblo de San Luis me da la oportunidad de volver, las primeras viviendas que construyamos van a ser las suyas”. Este lunes, con la homologación de la adenda, el Gobierno dio un nuevo paso esencial hacia la consumación de ese compromiso. “Hoy cumplimos con la palabra empeñada”, enfatizó.
La construcción de viviendas también implica una reactivación importante de la obra pública, que trae consigo la creación de nuevos puestos de trabajo. Por ese motivo, en señal de acompañamiento, varios representantes de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) se hicieron presentes en el salón municipal. “Estén tranquilos que la política de viviendas comenzó a rodar y vino a quedarse para siempre”, les aseguró Poggi.
El intendente, Jorge Videla, también participó del acto y destacó la decisión del Jefe de Estado de cumplir con aquellos vecinos que esperaban la casa desde su anterior mandato. “Poggi ha fijado la construcción de casas como una prioridad de la obra pública y nosotros acompañaremos eso”, señaló, y resaltó que para las familias de Juana Koslay es una jornada “sobrada de alegría y muy emocionante”.
Al igual que en las demás localidades, las obras en Juana Koslay serán divididas en dos etapas, con la única premisa de asegurar que todas las familias puedan levantar sus copas y brindar por la Navidad en 2025 en sus casas propias. La construcción de la primera tanda de viviendas iniciará en los próximos días y Poggi ya aseguró que convocará en pocos meses a cada familia para visitar los lotes y compartir juntos todo el proceso de edificación.
Cómo lo vivieron los vecinos
Por supuesto, la ceremonia contó con el acompañamiento de las familias que desearon presenciar el histórico acontecimiento, que jamás olvidarán. Las lágrimas que durante años fueron producto del sufrimiento, indignación, bronca, dolor y angustia por sentirse engañados, esta vez fueron sinónimo de alegría, desahogo y gratitud.
“Hice muchas cartas para la gestión anterior pero nunca obtuve respuesta. Había incluso ido a ver el lugar donde iba a ser construida la casa, pero de un día para otro hubo elecciones, cambió el gobierno y nos dejaron de lado”, comentó Romina Tandura. La beneficiaria recordó el día en que Poggi anunció que ese sueño finalmente sería realidad: “Lloré con mis tres hijas, es una tranquilidad saber que aposté a terminar de pagar las cuotas y todo finalmente valió la pena”, subrayó emocionada.
Las vidas de cada uno de ellos debió haber sido diferente. En circunstancias ideales, los beneficiarios deberían estar próximos a celebrar una década entera bajo techo propio, pero por decisiones políticas que los exceden se quedaron durante años con las manos vacías.
La mayoría convivió con esa frustración de manera similar. Entre la desilusión, la lucha por reclamar lo que ellos sentían que les pertenecía, la exasperación por no recibir respuestas y nuevamente la desesperanza, por intuir que no tenían herramientas para revertir la situación.
Sin embargo, el 10 de diciembre de 2023 esa combinación de sentimientos pesimistas mutó. “A medida que el tiempo pasaba nuestra ilusión se fue rompiendo y cayendo, pero hoy este Gobierno nos demuestra que podemos confiar en ellos”, resaltó Matías Paso, quien lleva soportando el peso de alquilar durante 15 años con su pareja. “Lo esperamos hace mucho tiempo, la verdad que es un alivio, una tranquilidad y una seguridad tremenda para mi familia”, expresó.
