Mariano Cúneo Libarona, ministro de Justicia de la Nación, anunció que impulsará un proyecto para modificar la Ley de Imputabilidad vigente en la Argentina, para que los menores puedan ser condenados a partir de los 14 años. Según su punto de vista, a esa edad los chicos “muestran una personalidad que merece la atención y la sanción” eventual. En declaraciones radiales, el funcionario también deslizó la posibilidad de crear una fiscalía especializada en hechos de corrupción.
Horas antes de participar de la reunión de Gabinete que el presidente Javier Milei adelantó por su viaje a Suiza, donde esta semana participará del Foro Económico Mundial de Davos, el ministro Cúneo Libarona habló en Radio Rivadavia y reforzó su idea de bajar la edad de imputabilidad a los 14 años, sin reparar en el delito cometido. Al día de hoy, la normativa vigente dispone que un menor puede ser condenado a partir de los 16.
“La edad que me gusta es a los 14 años, y para todos los delitos. Es la que sostienen casi los 30 proyectos que tengo arriba de mi escritorio, que se han presentado y no han tenido acogida legislativa. Sea un hurto, robo o abuso, el chico ya demuestra una personalidad que merece atención y sanción”, explicó el funcionario.
En este sentido, el jurista enfatizó que procurará garantizar “la reinserción social” y el acceso a la educación de ese “menor condenado”, porque considera que, de lo contrario, el sistema penal “no sirve”.
“Dividir según los delitos y dejar algunos sin castigo o educación, que es lo que yo pretendo, carece de sentido. Ese chico merece cuidado, atención, reeducación, trabajo y formación”, subrayó Cúneo Libarona durante la entrevista.
Al ser consultado sobre si su proyecto para bajar la edad de imputabilidad tiene puntos en común con el que en 2019, durante la presidencia de Mauricio Macri, presentó Germán Garavano, el Ministro de Justicia de la Nación optó por dividir la imputabilidad de los menores en dos facetas para detallar su propuesta. Por un lado, manifestó su idea de contar con “un sistema procesal distinto”, al considerar que un menor no puede ser sometido a un juicio similar al de un mayor. “Tiene que ser distinto el tribunal especializado, con asistencia y defensa al menor, cuidado tutelar al imputado y a la víctima, y debe tener un sistema mucho más rápido que el juicio de mayores”, detalló.
En esa misma línea, continuó: “Por otro lado, el menor no me sirve que vaya a una cárcel donde hay capacidad para 200 chicos, pero se alojan 350. Salen peor que como entraron y después pasan al régimen de mayores. Es espantoso”.
Frente a este escenario, Cúneo Libarona quiere hacer hincapié “en la reeducación, la resocialización, obligación de estudio y trabajo” de los chicos, dado que algunos “tienen la posibilidad que tal vez otros no tuvieron de poder volver a reinsertarse en la sociedad adecuadamente”.
“No creo en la sanción. Tenemos que darle herramientas para poder reinsertarse en la sociedad. Démosle otra oportunidad. No hagamos como con el mayor de 50 que ya tiene su personalidad formada y entra en la cárcel así nomás”, puntualizó el sucesor de Martín Soria en la cartera de Justicia.
En simultáneo, Cúneo Libarona dijo que tiene “en la cabeza” la conformación de una “fiscalía especial dedicada a la corrupción”, bajo el ámbito del Ministerio Público Fiscal, porque su objetivo es “perseguir más que nadie” ese tipo de delitos para decirle “basta a la impunidad”.
“No la llamaría Conadep contra la corrupción, sino fiscalía especial dedicada a la corrupción”, expresó en otro tramo del reportaje. Sobre este punto, el funcionario consideró que esa “fiscalía especial” dedicada a la investigación de delitos de corrupción funcionará bajo la órbita del Ministerio Público Fiscal, que a su criterio “es muy bueno”.
La Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep) fue creada en 1983 por el entonces presidente Raúl Alfonsín, con el fin de investigar las violaciones a los derechos humanos cometidos por la última dictadura cívico militar.
”El tema de la corrupción es prioritario. Yo voy a perseguir la corrupción más que nadie, pero a través de los roles que corresponda. Los fiscales de juicio oral son buenísimos. Entonces, ellos son quienes tienen la tarea” de investigar, concluyó.